Mensaje Julio A. millán
 

Tlacaélel... el que hace
a la gente tomar un rostro.

En la historia del México precortesiano existió un distinguido personaje, quien por sus cualidades y obras merece ser recordado y ampliamente conocido. A él se debe gran parte de la gloria del Imperio Azteca, nos referimos a TLACAÉLEL.

TLACAÉLEL fue para cinco Emperadores Aztecas, el Consejero Supremo, cargo que ocupó por muchos años al grado que referirse al gran Cihuacóatl, es hablar del lapso de mayor esplendor del Imperio.

Entre los títulos que le fueron conferidos en vida según los cronistas, se tienen: brazo del IZCÓATL; cerebro de MOCTEZUMA ILHUICAMINA y alma de AXAYÁCATL, TIZOC y AHUÍZOTL.

TLACAÉLEL, el guerrero, fue vencedor de Tepanecas, Coyohuacanos, Xochimilcas, Cuitláhuac, Tlatelolcas, Matlatzincas, Chichimecas, Metztitlanes, Malinalcas, Huastecos, Totonacas, Mixtecos, Zapotecos y Mayas, tanto de Chiapas como de Guatemala; mantuvo pactos de neutralidad con los pueblos de Cholula, Tlaxcala y Huexotzingo y la única incursión en la que fueron derrotados, a la mitad de su vida guerrera, fue contra los purépechas de Michoacán.

TLACAÉLEL, el reformador, es la manifestación más fecunda y creativa de este distinguido personaje.

En el campo político aconseja a IZCOATL el establecimiento de títulos de nobleza, así como encomendar la dirección de ciertos puestos importantes a militares distinguidos en los campos de batalla, posteriormente define una compleja estructura de gobierno, que funcionaba bajo un concierto tan admirable, que no se impedían a pesar de la cantidad y diversidad de funciones. De ahí que dicho orden y concierto permitiría una gran agilidad a la administración pública, dentro de todo el Imperio Azteca.

Uno de los grandes aciertos de TLACAÉLEL en la política externa, consistió en promover y consolidar la creación de una CONFEDERACIÓN entre los pueblos del ANÁHUAC, integrado por los reinos de TENOCHTITLAN, TEXCOCO y TACUBA que materializó un sistema y pacto de no agresión y ayuda mutua; hecho en que descansó el gran poderío y fortaleza del Imperio.

Aconseja también el reparto de tierras y el establecimiento de un sistema tributario, reforma que permitió a los Emperadores Aztecas contar con un estado económicamente fuerte que les garantizó a su vez disponer de recursos para sostener la expansión de su poderío militar.

Se le atribuye a TLACAÉLEL haber creado esa concepción místico-guerrera, mediante la cual se unificó espiritualmente a los aztecas.

De acuerdo con los emperadores, TLACAÉLEL inició y llevó a cabo con gran éxito otras reformas que consistieron en la destrucción de los códices, tanto de los pueblos vencidos como los propios, para más tarde pintar otros de acuerdo con la nueva concepción mística-guerrera.

En el campo legal, preparó un conjunto de leyes pragmáticas que regulaban la vida de los aztecas en sus diversos aspectos.

En el curso de su prolongada vida de consejero favoreció el desarrollo de los que ahora pudiera denominarse conciencia histórica, la cual consistió en instituir y exaltar la grandeza y afanes de dominio de los Aztecas sobre otros pueblos.

Declinó varias veces ocupar el cargo de emperador, prefiriendo en su lugar poner a disposición de otro gobernante su lúcida inteligencia y capacidad. Pensamiento y sentimiento que caracterizan al verdadero consejero que permuta el bastón del poder por la voluntad de ayudar.

TLACAÉLEL "el Consejero", constituye la manifestación más clara de la humanidad estoica, la prudencia, la lealtad.

 
   
 
+5255 55-24-77-50 •
info@cisc.com.mx | www.consultoresinternacionales.com
 
José María Rico 55. Col. Del Valle. Ciudad de México 03100 Tel. +5255 5524-7750 y +5255 5534-9182 Ext. 209 y 201